Me había preguntado alguna vez, mientras leía el antigüo testamento, lo fácil que era hablar con el Creador en aquella epoca, pero observando nuestro tiempo, veo que somos tan distantes los unos a los otros, que es más fácil que nos escuche el Creador, que escucharnos a nosotros mismos, que según nuestros sentidos podemos vernos y tocarnos.Las oraciones son poderosas, nos iluminan y nos hacen fortalecer el vinculo que tenemos con TODO y por ende nos define nuestro espiritú, dando como resultado respuestas a nuestras dudas y una paz interior.
Tengo un libro que vino a mí últimamente, es un libro de mi abuela, es un libro de oraciones en Latín y al principio del libro viene una leyenda:
"De suma virtud y eficacia para curar toda clase de dolencias, asi del cuerpo como del alma; como tambien un sin número de prácticas para liberarse de hechizos y encantamientos con bendiciones y exorcismos."
Vienen oraciones en hebreo y latín, por cada oración viene la historia del origen y la intención de la oración; Considerando que la mejor oración es la que sale de nosotros mismos, creo que no esta de más apoyarnos en la meditación de alguno de nuestros antecesores, me voy a permitir compartirles esta:
En nom de Déu el Pare en nom de Déu Fill, en nom de Déu l'Esperit Sant, em guardará i em iliurá de tot mal de cos i de l'ánima. Amén.
Corona de Crist, Creu de Crist, Sag de Crist, em guardará i em iliurará de tot mal del cos i de l'ánima. Amén.
Jesús de Nazaret, Rei de Jedea: Pel teu sagrat nom i titul, guarda'm i illuara m de tot mal del cos i de l'ánima. Amén.
Esta nos sirve para centrarnos y pedirle al Creador que nos resguarde y/o liberé de todo mal, creo que es conveniente rezarla cuando empezamos el día y cuando lo terminamos, de preferencia antes de las oraciones que acostumbramos.
Citaré un texto breve de cuando San León Papa le envió una oración a Carlo Magno Emperador de Hesse y de la Germania:
"Si vos creéis firmemente y sin ninguna duda, cada día que digaís la oración en vuestro retiro o recogimiento, con devoción, y la llevéis sobre de vos con respeto, sea en la guerra, sea en el mar ó en cualquier parte que os encontréis, ninguno de vuestros enemigos tendrá poder sobre vos: seréis invensible, y ganaréis fácilmente las batallas; os libraréis de los más grandes peligros, enfermedades y desgracias. En nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén."
Dudo mucho que de haber existido el mail en ese tiempo, el Papa San León le hubiera puesto una nota al final a su mail diciendole "Envia este mail a 10 personas y bla,bla,bla" les agradezo que hagan buen uso de lo que les comparto.
Que esten siempre bien.
When you kill your God you kill yourself, nunca escupas al cielo...
